¿Qué te parecería si te dijera que existe una valla de publicidad que no sólo puede conquistarte por su visión sino también por su aroma?
Pues empieza a pensarlo porque esa publicidad existe y se llama Marketing olfativo.
Se trata de un sistema novedoso que puede significar un antes y un después en el mundo de la publicidad. Imagina estar en una parada de bus y que de repente comiences a oler a café, o a crema de cacao, ¿verdad que te gustaría? ¡Seguro que te apetece chocolate!
Pues ahora imagina que tú eres el empresario que puede hacer una campaña de este tipo, seguro que te llama la atención. Aunque aún no es algo que en España se esté comercializando, sí que podemos encontrar información sobre personas que ya han experimentado una situación en la que han podido olfatear a través de un cartel.
La idea consiste en conseguir atraer a un mayor número de clientes para nuestro servicio o producto. Si paramos en una calle y el olor a café inunda nuestro sentido del olfato, lo más probable es que la sugestión haga que nos apetezca tomar un café, por lo que cuando podamos encontrar esta publicidad en nuestro país, será muy importante la ubicación que le demos, puesto que el cliente buscará la cafetería más cercana.
Con esto no estamos diciendo que el hecho de que una persona olfatee un aroma en concreto, consigamos que como si de una hipnosis se tratase vaya a querer consumir el producto sí o sí, sino que las personas respondemos en un porcentaje mayor a una imagen con sonidos y aromas que sólo a la visión. Es por esto que el olfato es uno de los sentidos más sensibles y reaccionamos más efusivamente que al resto de estímulos recibidos.
Podríamos pensar que hay muchos productos que no se prestan a este tipo de anuncios, y es verdad, pero en eso consiste la publicidad, en que contemos con los recursos necesarios para adaptar cada producto a la publicidad que éste merece, y con cuantos más medios contemos para eso, mejores resultados obtendremos.
Lo que sí es cierto es que puede que este tipo de marketing olfativo es probable que incremente el precio de las campañas publicitarias puesto que requiere de muchos procesos mucho más complicados que cualquier otra estrategia publicitaria, dependerá del producto que estemos comercializando para saber si es rentable contratar este medio publicitario.
Quizá sea un tema algo complicado y que puede parecer irse de la mente de algunas personas, pero lo cierto es que la publicidad avanza a pasos agigantados y debemos adaptarnos a lo que está por llegar.